Por William Schomberg y Andy Bruce
LONDRES, 14 dic - Las empresas británicas contrataron un número récord de personal en noviembre, lo que se suma a las señales de que el mercado laboral resistió el fin del plan de permisos del Gobierno y subraya el dilema del Banco de Inglaterra al reunirse sobre los tipos de interés esta semana.
Los datos de la Agencia Tributaria mostraron que 257.000 personas se incorporaron a las nóminas de las empresas el mes pasado, la mayor cantidad desde que se iniciaron los registros en 2014.
El Banco de Inglaterra, presionado para hacer frente al rápido aumento de la inflación, quiere estar seguro de que la expiración del plan de bajas laborales a finales de septiembre no ha provocado un aumento en el desempleo antes de cualquier decisión de subir los tipos por primera vez desde la pandemia.
Sin embargo, la rápida propagación de la variante ómicron del coronavirus ha hecho temer una nueva desaceleración económica y ha llevado a los inversores a apostar en contra de una subida de tipos por parte del Banco de Inglaterra tan pronto como el jueves, tras su reunión del Comité de Política Monetaria de diciembre.
"La combinación de un mercado laboral ajustado y un bajo desempleo evidenciado en los datos de hoy podría ser suficiente, por sí sola, para merecer una subida de tipos", afirmó Yael Selfin, economista jefe de KPMG Reino Unido.
"No obstante, con la aparición de la variante ómicron en las últimas semanas, ahora esperamos que el Comité de Política Monetaria posponga unánimemente la subida de tipos hasta el próximo año".
El director de estadísticas económicas de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, por sus siglas en inglés), Darren Morgan, advirtió que las cifras de las nóminas podrían incluir a personas que han sido despedidas recientemente pero que aún están resolviendo su preaviso, y que los datos pueden ser volátiles.
El aumento de octubre se redujo a 74.000, frente a los 160.000 comunicados inicialmente.
Aunque el panorama general de los datos era de un fuerte crecimiento del empleo y un número récord de vacantes, a los empresarios les preocupa que cualquier otra restricción para frenar la propagación del COVID-19 pueda afectar a la recuperación de la economía tras su caída en 2020.