MADRID, 25 mar -La ministra de Transportes española aceptó reunirse con los transportistas en huelga el viernes, después de que éstos rechazaran un paquete de ayudas de 1.000 millones de euros (1.100 millones de dólares) destinado a desactivar una huelga de 12 días por los precios del combustible que ha provocado una escasez esporádica de mercancías.
La ministra Raquel Sánchez anunció las medidas, que incluyen una rebaja de 0,20 euros por litro de combustible y una ayuda de 1.200 euros, tras mantener conversaciones durante toda la noche con la Plataforma Nacional por la Defensa del Sector del Transporte, que lidera las protestas.
Pero a las pocas horas, el grupo no oficial de camioneros que inició la huelga el 14 de marzo, y que fue excluido de las conversaciones con el Gobierno, rechazó la propuesta y comenzó a bloquear la céntrica avenida de La Castellana de Madrid.
"Le vamos a pedir que tenemos que trabajar a precios dignos... Queremos garantías para cubrir los costes de producción", dijo a los periodistas el líder de la protesta, Manuel Hernández, desde el centro de la marcha de Madrid.
Muchos de los manifestantes llevaban chaquetas de alta visibilidad que recordaban a las protestas de los "chalecos amarillos" de Francia. Los manifestantes también bloquearon la carretera de circunvalación de Barcelona y quemaron neumáticos en un paso fronterizo con Portugal.
Poco después del inicio de las protestas, la ministra Sánchez aceptó reunirse con los representantes de la Plataforma, a los que inicialmente había tachado de poco representativos y vinculados a la extrema derecha.
"Nunca he tenido ningún problema en recibirlos, pero lo que hay que celebrar hoy es este acuerdo, un acuerdo sin precedentes y eso es lo que voy a intentar trasladarles esta tarde", dijo a la cadena estatal TVE.
Sánchez dijo que todas las reivindicaciones de los transportistas estaban incluidas en el acuerdo, por lo que no había razón para mantener la huelga.
"Eso nos parece un parche momentáneo que no soluciona el problema en absoluto", dijo el manifestante Juan José Moral, mientras una multitud marchaba hacia el Ministerio de Transportes.
La rebaja en el precio de los carburantes, de la que una cuarta parte será pagada por las petroleras, se aplicará también a otras empresas de transporte, añadió. Los conductores de autobuses, furgonetas y vehículos ligeros (ambulancias, taxis y vehículo de turismo con conductor o VTC) también recibirán bonificaciones, aunque de menor cuantía.
Como parte del paquete, el Gobierno aprobará una nueva línea de créditos avalados por el Estado con una congelación de 12 meses en los reembolsos de los préstamos, o los llamados periodos de gracia, en los que las empresas sólo deben pagar los intereses y no el principal de un préstamo.
El Gobierno no ha revelado el importe de los nuevos préstamos de liquidez para apoyar a las empresas medianas y a los hogares en el contexto de la invasión rusa de Ucrania.
(1 dólar = 0,9083 euros)