Por Shadia Nasralla
LONDRES, 8 nov -Los precios del petróleo caían más de 2 dólares el martes debido a que las preocupaciones sobre una recesión y el empeoramiento de los brotes de COVID-19 en China, el principal importador de crudo del mundo, aumentaban los temores de una menor demanda de combustible.
* El crudo Brent bajaba algo más de 2 dólares a 95,83 dólares el barril a las 1830 GMT, mientras que el petróleo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos también cedía algo más de 2 dólares a 89,80 dólares.
* Ambos referenciales alcanzaron el lunes su nivel más alto desde agosto, en medio de informes de que los líderes en China estaban sopesando levantar las estrictas restricciones por el COVID-19 en el país.
* Sin embargo, los nuevos casos de coronavirus han aumentado en Cantón y otras ciudades chinas, mostraron datos oficiales el martes.
* Los participantes del mercado también están atentos a los datos del Índice de Precios al Consumidor de Estados Unidos el viernes, dijo la analista de CMC Markets, Tina Teng.
* "Debido a la inflación persistente y el aumento de las tasas de interés en las principales economías occidentales, los futuros del petróleo aún están valorando la posibilidad de una recesión económica mundial", dijo Teng.
* La prohibición de la Unión Europea sobre el petróleo ruso, impuesta en represalia por la invasión de Rusia a Ucrania, comenzará el 5 de diciembre y será seguida por una suspensión de las importaciones de productos derivados del petróleo en febrero. Moscú llama a sus acciones en Ucrania "una operación especial".
* Las existencias de crudo de Estados Unidos habrían crecido en alrededor de 1,1 millones de barriles la semana pasada, mostró el lunes un sondeo preliminar de Reuters.
* Los agentes en el mercado, preocupados por la alta inflación y el alza de las tasas de interés, que podrían desencadenar una recesión mundial, también estarán atentos a los datos sobre los precios al consumo en Estados Unidos el viernes.
* El martes, la EIA recortó sus perspectivas de demanda de energía en Estados Unidos para 2023 y dijo que la previsión de producción en el país para el próximo año sería un 21% menor de lo que esperaba anteriormente.