La afirmación se basa en el hecho de que, en la noche del 1 de julio, los astrónomos detectaron un objeto celeste inusual que se desplazaba a gran velocidad hacia el Sol.
Según una afirmación que circula por las redes sociales, formas de vida extraterrestre están viajando rápidamente para llegar a nuestro planeta en noviembre. Además, estos "alienígenas" podrían tener intenciones hostiles. La afirmación se basa en el hecho de que la noche del 1 de julio, los astrónomos detectaron un objeto celeste inusual viajando a gran velocidad hacia el Sol.
Este visitante sorpresa, llamado 3I/ATLAS, tiene una característica única: su órbita sugiere que se trata de un objeto "interestelar" procedente de fuera del Sistema Solar. Los astrónomos creen que 3I/ATLAS es un cometa. Sin embargo, en un artículo que aún no ha sido revisado por pares, tres físicos argumentaron que este objeto podría pertenecer en realidad a vida extraterrestre, lo que provocó una amplia cobertura mediática.
La noticia de este artículo, que se difundió rápidamente en la prensa, evolucionó en las redes sociales hacia la especulación de que los extraterrestres invadirían la Tierra en noviembre.
3I/ATLAS: el cuerpo celeste más rápido jamás observado
3I/ATLAS no es el primer visitante exterior del Sistema Solar. Anteriormente se detectaron otros dos cuerpos celestes atravesando el espacio interestelar y acercándose al Sol.
Sin embargo, hay algunas características que hacen que este nuevo visitante sea extremadamente interesante. Por ejemplo, este objeto se desplaza a una velocidad de 245.000 km/h. Se trata de la mayor velocidad jamás detectada en el Sistema Solar. También se estima que tiene un tamaño de más 20 kilómetros, lo que significa que se trata de una masa gigantesca.
Investigadores de la Universidad de Oxford calcularon que el cometa 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar en entrar en el Sistema Solar, tiene unos 3.000 millones de años más que el Sol. El Sistema Solar tiene unos 4.500 millones de años.
En un post compartido en la cuenta X del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, se incluyen las siguientes declaraciones junto a la imagen del objeto: "El cometa 3I/ATLAS fue avistado el 1 de julio, pero no es de aquí. Procede de fuera del Sistema Solar y es el tercer cometa interestelar conocido. Los astrónomos lo están estudiando antes de que desaparezca".
El veterano telescopio espacial Hubble de la NASA captó recientemente imágenes impresionantes de 3I/ATLAS. Un astrónomo aficionado en Bluesky, que utiliza el seudónimo "astrafoxen", reunió las imágenes y las compartió, escribiendo:
"¡Se han publicado imágenes del telescopio espacial Hubble del cometa interestelar 3I/ATLAS! Se tomaron hace 5 horas. Hay muchos rayos cósmicos en las imágenes, pero la cola del cometa (el rastro que deja a su paso) tiene un aspecto muy agradable y esponjoso."
Antes de 3I/ATLAS, los únicos objetos interestelares conocidos eran Oumuamua, que fue detectado en 2017 y sorprendió a los científicos por su forma de barra, y el cometa Borisov, que se rompió en enormes pedazos dos años después. Ambos han abandonado ya el Sistema Solar y han regresado al espacio interestelar.
¿De dónde viene la afirmación de los extraterrestres?
La afirmación de que 3I/ATLAS podría ser en realidad una "firma tecnológica" de vida extraterrestre se planteó por primera vez en un artículo publicado por Avi Loeb, un astrofísico de la Universidad de Harvard conocido por sus interesantes afirmaciones sobre extraterrestres, y sus colegas.
El artículo, escrito por Loeb y dos científicos británicos, que aún no ha sido revisado por pares, pone de actualidad esta hipótesis al llamar la atención sobre la trayectoria anómala y la velocidad inusual del objeto.
Sin embargo, las observaciones preliminares muestran que 3I/ATLAS es un cometa de gran tamaño, rodeado por una coma de hielo, gas y polvo de 24 kilómetros de ancho. En un artículo publicado el 16 de julio en la plataforma de preimpresión arXiv, Loeb y su equipo sostienen que podría no tratarse de un cometa ordinario, sino de una nave espía enviada por una civilización avanzada. "Si la hipótesis resulta ser correcta, las consecuencias podrían ser nefastas para la humanidad", afirma el artículo.
Sin embargo, muchos astrónomos cuestionan estas afirmaciones. Por ejemplo, Darryl Seligman, astrónomo de la Universidad Estatal de Michigan, declaró a Livescience que el objeto mostraba los síntomas clásicos de un cometa y afirmó: "Todos los datos sugieren que se trata de un cometa ordinario expulsado de otro sistema estelar".
Loeb, por su parte, aunque esta vez no defendió ardientemente la hipótesis extraterrestre, sostiene que tales "ejercicios de pensamiento" son importantes en la ciencia. Sin embargo, reconociendo que es improbable que 3I/ATLAS sea tecnología alienígena, afirmó: "Lo más probable es que se trate de un objeto interestelar completamente natural, posiblemente un cometa."
Loeb hizo la misma afirmación para Oumuamua
No es la primera vez que Loeb hace afirmaciones de este tipo. También había sugerido que Oumuamua, el primer objeto interestelar descubierto en el Sistema Solar, era una tecnología alienígena.
Incluso recaudó fondos en 2014, argumentando que el meteorito del Océano Pacífico también podría contener los restos de una tecnología alienígena, y finalmente extrajo piezas del océano y las analizó en su laboratorio. Sin embargo, no pudo obtener ningún dato que demostrara su tesis. Loeb, antiguo director del Departamento de Astrofísica de Harvard, se ha distanciado de sus colegas en los últimos años.
¿Podría ser cierto?
Sin embargo, hay algunas razones por las que los trabajos de Loeb han recibido tanta publicidad. Sara Webb, profesora del Centro de Astrofísica y Supercomputación de la Universidad Tecnológica de Swinburne, nos recuerda que ya hemos enviado sondas de este tipo al espacio.
En 'The Conversation', Webb afirma: "La idea puede parecer extraña al principio, pero los humanos también han enviado sus propios vehículos interestelares al espacio, con las Voyager 1 y 2 en la década de 1970. Estos vehículos se encuentran ahora fuera del Sistema Solar. Los vehículos Pioneer 10 y 11 pronto cruzarán esta línea", dijo.
"Por lo tanto, no es demasiado descabellado pensar que otras civilizaciones, si realmente existen, puedan haber enviado de forma similar sus propios vehículos de exploración".
¿Cómo reconocer una nave alienígena?
Webb también enumeró algunas características para distinguir los cuerpos celestes naturales de los objetos artificiales que pueden pertenecer a la vida extraterrestre:
- Si emite gases, como un cometa, es probable que sea natural.
- Si emite señales de radio, es un fuerte indicio de artificialidad.
- Si hay destellos eléctricos debidos a la luz solar, también podría indicar tecnología artificial.
- Una de las señales más evidentes es cuando el objeto cambia de dirección o maniobra por sí solo.
- Si el objeto se aproxima a la Tierra y se asienta en una órbita estable, la incógnita es mucho mayor.
Pero por intrigantes que sean estas posibilidades, las pruebas de que disponen los científicos sugieren que se trata simplemente de una roca interestelar helada, vieja y extraordinariamente rápida.
¿Cuánto se acercará a la Tierra?
Lo más cerca que 3I/ATLAS estará de la Tierra será el 19 de diciembre de 2025. Según los cálculos orbitales, el objeto estará a una distancia de unas 1,8 unidades astronómicas, es decir, unos 270 millones de kilómetros.
Esta distancia es aproximadamente 1,8 veces la distancia entre la Tierra y el Sol. Por tanto, no supondrá ningún peligro para la Tierra. Lo más cerca que el objeto estará del Sol será el 30 de octubre de 2025, cuando 3I/ATLAS se encuentre a 210 millones de kilómetros de nuestra estrella. Los científicos esperan observar con detalle el cuerpo celeste en esas fechas.