Miles de mexicanos marcharon en Ciudad de México el sábado para protestar contra el Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La convocatoria partió inicialmente de la Generación Z, aunque más tarde los partidos de la oposición animaron a sus simpatizantes a sumarse, lo que dio lugar a una multitud dominada por críticos del Gobierno en sentido amplio.
La marcha transcurrió en gran medida de forma pacífica hasta que unos jóvenes encapuchados desmontaron el vallado de la Policía cerca del Zócalo, lo que provocó breves enfrentamientos con lanzamiento de piedras y gases lacrimógenos.
Algunos jóvenes manifestantes llevaban banderas negras con la calavera y las tibias cruzadas del manga 'One Piece', aunque eran minoría.