PUBLICIDADEl 27 de junio, Ucrania firmará el Acuerdo de Asociación y de libre comercio con la Unión Europea.
Lo confirmó el jueves pasado el presidente ucraniano, Petro Poroshenko:
“El 27 de junio firmaré el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y todos los trámites habrán concluido”.
Ningún otro país ha pagado tan cara la firma del Acuerdo. Hace siete meses, la espantada de Yanukóvich desencadenó la más grave y violenta crisis en la historia de la Ucrania moderna.
El entonces presidente debía firmar en noviembre el capítulo político del Acuerdo en Vilna, pero presionado por Moscú, dió marcha atrás en el último momento.
Los ucranianos se echaron masivamente a la calle para protestar pacíficamente contra la decisión de suspender la firma.
El 30 de noviembre, las fuerzas especiales de la policía disolvieron por la fuerza y en plena madrugada una de las manifestaciones proeuropeas. Las autoridades ucranianas adoptaron inmediatamente después una serie de prohibiciones, como la de reunirse y manifestarse, que solo consiguieron empeorar las cosas.
Para atajar las protestas, Yanukóvich viajó a Moscú y estampó su firma, pero en otro acuerdo y con Rusia. A cambio, el presidente Putin, le ofreció una rebaja de los precios del gas y una ayuda financiera para aliviar al país, al borde de la quiebra.
Para los manifestantes, el acercamiento a Rusia fue una nueva provocación. Los proeuropeos se fortificaron en el centro de Kiev y se negaron a abandonar la céntrica plaza Maidan hasta la dimisión del presidente.
Los enfrentamientos degeneraron rápidamente y se produjeron las primeras víctimas mortales ante los ojos impotentes de la comunidad internacional.
Europa intentó frenar el baño de sangre. Los ministros de Exteriores de Francia, Alemania y Polonia buscaron soluciones a la crisis durante tensas negociaciones con Yanukóvich.
Días después, el Parlamento ucraniano destituyó a Yanukovich que desapareció del mapa. El país se adentró en un periodo de desestabilización que culminó con la ocupación de Crimea y la posterior anexión rusa de la región.
El 21 de marzo, el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, firmó durante una cumbre de jefes de Estado de la Unión Europea, el primer capítulo del Acuerdo de Asociación entre su país y la UE. La firma del capítulo económico, en cambio, fue aplazada hasta las elecciones presidenciales en Ucrania que tuvieron lugar el 25 de mayo.
euronews:
Para hablar de la firma del Acuerdo tenemos con nosotros a Amanda Paul, analista del Centro de Política Europea de Bruselas.
Ucrania y la UE firman este Acuerdo de Asociación en un contexto completamente diferente al de hace siete meses. Muchos ucranianos se preguntan después de los trágicos acontecimientos que han vivido, si este Acuerdo no es demasiado poco y si no llega demasiado tarde.
Amanda Paul:
Es cierto que ahora la situación es totalmente diferente. Y creo que las presidenciales mostraron que el hecho de que ganara el señor Poroshenko, que se presentó a las elecciones como candidato abiertamente proeuropeo, muestra que la sociedad ucraniana quiere realmente una mayor integración con la UE.
En cuanto a la Unión Europea, creo que los acontecimientos de los últimos meses han dinamizado de alguna forma su enfoque con respecto a Ucrania. Están más comprometidos política y económicamente a avanzar en Ucrania y en su proceso de integración. Por supuesto que no va a ser fácil, porque sabemos y la sociedad ucraniana sabe que esto representa una amenaza para el gran vecino ruso, que sigue oponiéndose firmemente a la integración de Ucrania en la UE.
euronews:
Al firmar el acuerdo, ¿qué mensaje están enviando a Rusia, Ucrania y Europa? Sobre todo, teniendo en cuenta las nuevas disputas sobre el gas y comerciales entre Kiev y Moscú…
Amanda Paul:
La firma del acuerdo es muy importante. Es un mensaje claro a los rusos de que Ucrania seguirá adelante con su decisión soberana de integrarse en la UE a pesar de las medidas coercitivas e intimidatorias que adoptó y sigue adoptando Moscú. El mensaje es que no van a permitir que Rusia les impida decidir su futuro de la manera que consideren oportuna como corresponde a un país independiente.
Por supuesto, Rusia todavía tiene muchos ases en la manga. Por ejemplo, están jugando la carta del gas. Esperemos que esto se resuelva en un futuro próximo. Si la UE integra correctamente a Ucrania en su propio mercado de la energía, y adopta las medidas necesarias, se podrá resolver el problema, porque al final, el país que pagaría el precio mas caro sería de hecho la Federación rusa.
euronews:
¿Cree que el Acuerdo de Asociación puede ayudar a lograr las reformas necesarias y persuadir a los elementos prorrusos en Ucrania (incluyendo Crimea) de que el rumbo proeuropeo del nuevo Gobierno es el correcto?
PUBLICIDADAmanda Paul:
Este Gobierno va a estar muy vigilado por la sociedad ucraniana, por el euro Maidán, que va a exigir que cumplan las promesas que han hecho.
Y creo que si construyen una Ucrania fuerte, una Ucrania próspera, que se rija por el imperio de la ley, y otros derechos y libertades fundamentales, esa será la mejor receta para la integración del país. Yo diría que la fórmula sería hacer que el país sea fuerte para que aquellos elementos de la sociedad ucraniana que no están contentos en este momento, las personas que están llevando a cabo actos terribles en la Ucrania oriental, quieran formar parte de él.
euronews:
En un futuro próximo, ¿está Europa realmente dispuesta a apoyar a Ucrania y a ayudar al país a adoptar las reformas necesarias?
Amanda Paul:
Creo que la UE hará todo lo que esté en su mano para apoyar el proceso de reformas. Pero si la pregunta es si Europa está dispuesta a ofrecer a Ucrania una perspectiva de adhesión, que para que negarlo, sería el mejor aliciente del mundo para hacer que el proceso de reformas ucraniano sea rápido y exitoso, pues no. No están preparados para eso.
Creo que ese objetivo se puede esperar a medio, no a corto plazo. Ucrania, como Estado europeo, merece tener una perspectiva de miembro, porque se merecen estar en la UE, y para Ucrania, el apoyo de la UE es extremadamente importante.
PUBLICIDADTambién es necesario seguir apoyando a otros elementos en Rusia, en la sociedad civil y a otras, digamos, partes interesadas para que no se opongan a seguir adelante. Esta región tiene que ser prioritaria. No podemos permitirnos el lujo de relegarlos en la agenda.
euronews:
Amanda Paul, del Centro de Política Europea de Bruselas, gracias por estar con nosotros.