Estaba inmersa en su última novela pero no ha llegado a finalizarla. La reina de la novela negra británica, Phyllis Dorothy James, ha muerto a los 94 años en su Oxford natal.
Conocida para sus millones de lectores bajo el alias P.D. James, la autora ha dejado una veintena de títulos, entre ellos “Un impulso criminal” o “Mortaja para un ruiseñor”.
Un legado no muy prolífico debido a su dedicación tardía a la escritura, fue en 1980 con su octava novela, “Innocent Blook”, que saltó al panorama litarario internacional.
“Creo que mientras viva, voy a seguir escribiendo”, dijo durante una de sus últimas entrevistas.