Decenas de manifestantes contra la organización antiislamista alemana se han reunido en la capital, Berlín, este lunes. Las autoridades habían
Decenas de manifestantes contra la organización antiislamista alemana se han reunido en la capital, Berlín, este lunes.
Las autoridades habían prohibido la concentración de Pegida en Dresden por razones de seguridad, ya que su líder había sufrido amenazas “creíbles” contra su vida.
La canciller Angela Merkel, sus socios socialistas, así como Die Linke y los verdes se han mostrado en contra de que se coarte el derecho de expresión de Pegida.
“Como canciller”, ha dicho Merkel, “independientemente de si me gusta o no su contenido opino que todo el mundo tiene el derecho fundamental de manifestarse”
Pegida, tan reticente a hacer declaraciones a los medios, ha convocado una rueda de prensa para mostrar su reacción. Esperan poder volver a tomar las calles pronto.
Su líder y fundador, Lutz Bachmann, declaraba: “Parece que seguramente podremos manifestarnos de nuevo el próximo lunes. Quiero abundar en esto: me gustaría, nos gustaría, que los representantes elegidos por la gente hicieran su trabajo. Y entonces, los lunes por la noche, las 25.000 personas que tomamos las calles en Dresden podríamos quedarnos en casa con nuestras familias”.
Con su trabajo se refieren detener la supuesta “islamización” de Alemania, una idea que uno de cada tres alemanes comparte según una reciente encuesta. Y otra manifestación, también en Berlín, en apoyo a Pegida muestra su tendencia ascendente. Algo que el partido eurófobo Alternativa para Alemania intenta rentabilizar tendiendo puentes.