La segunda ciudad del Yemen, Adén, sigue siendo el blanco de los combatientes del movimiento chií de los hutíes y la coalición árabe, de la que está al frente Arabia Saudí.
Los milicianos del grupo también conocido como Ansar Alá sigue avanzando en la ciudad a pesar de que los bombardeos aéreos por parte de la coalición no cesan y de que los combatientes leales al presidente intentan frenar el avance.
La coalición árabe también bombardeó por primera vez el centro y los barrios de la capital del país, Saná.
Debido al recrudecimiento del combate, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha pedido un alto el fuego humanitario a la coalición árabe y ha sido aceptado. Dos aviones cargados de material sanitario podrán acceder al país.
Rusia ya había pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que se obligase a la coalición árabe a llevar a cabo pausas durante sus bombardeos para evacuar a ciudadanos extranjeros y el acceso a la ayuda humanitaria.
El gobierno de Paquistán ya ha podido evacuar a 768 de los alrededor de 3000 ciudadanos que estaban en el país.