Se ha registrado una alta participación, incluso mayor de la esperada, y se augura una victoria del ‘sí’. Tan solo 22 años después de despenalizar la
Se ha registrado una alta participación, incluso mayor de la esperada, y se augura una victoria del ‘sí’. Tan solo 22 años después de despenalizar la homosexualidad, Irlanda podría ponerse en el vagón de cabeza mundial en derechos de los gays.
Y es que son muchos los que apoyan esta iniciativa. Los Cole, por ejemplo, recién casados este viernes, fueron a votar justo después de la ceremonia para dar su apoyo al matrimonio igualitario: Se trata de igualdad. Nadie nos dijo a nosotros con quién podíamos o no podíamos casarnos y creemos que todos deberían tener la misma oportunidad. Si quieres deberías poder casarte con la persona que quieres, como hemos hecho nosotros hoy. Es solamente una cuestión de igualdad”, decía Anne.
Ha habido una gran movilización incluso en la diáspora irlandesa por el mundo, en comunidades como la que vive en Estados Unidos. También estudiantes o hombres de negocios modificaron sus viajes para poder votar en el referéndum.
El nivel de influencia real de la Iglesia católica en la sociedad, la diferencia de sensibilidades en el voto rural y urbano y la propia alta participación mantendrán la incertidumbre sobre el resultado hasta que termine el recuento y se anuncie el resultado este mismo sábado.