Los cocaleros peruanos afectados por la guerra que libra Lima contra el narcotráfico piden que se detenga la destrucción de arbustos de coca hasta
Los cocaleros peruanos afectados por la guerra que libra Lima contra el narcotráfico piden que se detenga la destrucción de arbustos de coca hasta que les den opciones reales para sembrar otros cultivos. Aseguran que estas operaciones han acabado con su forma de ganarse la vida.
Carlos Figueroa es representante de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (DEVIDA): “En estas zonas lo que está ocurriendo es que hay un manejo del narcotráfico. Con esto no queremos decir que el campesino cocalero es un narcotraficante, eso no es así. El narcotráfico los utiliza, el narcotráfico está detrás de ellos para jalarlos hacia su cadena productiva delictiva”.
Las autoridades de Perú, primer productor mundial de cocaína, pretenden destruir 35.000 hectáreas de plantaciones. Para ello, cuentan con la colaboración de Estados Unidos. Entre 2013 y 2014 Perú ya erradicó otras 55.000 hectáreas.