En un piso del distrito bruselense de Schaerbeek pudieron fabricarse las bombas que acabaron con la vida de 130 personas el 13 de noviembre en París
En un piso del distrito bruselense de Schaerbeek pudieron fabricarse las bombas que acabaron con la vida de 130 personas el 13 de noviembre en París.
La Fiscalía belga ha confirmado el hallazgo de restos de explosivos, material para su fabricación, tres cinturones posiblemente destinados a transportar explosivos, así como varias huellas dactilares, una del principal sospechoso huido, Salah Abdeslam, cuya pista se pierde al día siguiente de los atentados yihadistas de París, en una calle de Schaerbeek, en Bruselas.
La Fiscalía belga ha explicado que todo ello fue hallado durante un registro en dicho apartamento el pasado 10 de diciembre. Lo ha hecho después de que la prensa flamenca publicara que los cinturones utilizados en los ataques del 13-N fueron fabricados en el distrito de Schaerbeek y asegurara que dicha vivienda sirvió de escondite para Salah Abdeslam tras los atentados de París.
Desde el 13-N, la justicia belga ha inculpado a diez personas por terrorismo. Nueve permenecen en detención preventiva.