Las autoridades rusas han detenido a cinco personas por posible negligencia tras el naufragio de este fin de semana en el noreste del país.
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Las autoridades rusas han detenido a cinco personas por posible negligencia tras el naufragio de este fin de semana en el noreste del país.
Al menos 13 niños, de entre doce y quince años, murieron el sábado ahogados cuando realizaban una excursión por un lago en la región de Carelia.
Nadie se explica cómo se realizó el viaje si en la víspera los servicios meteorológicos advertieron del mal tiempo, y no llevaban suficientes chalecos salvavidas.:
“La excursión al lago estaba prevista para estos días, es cierto. Pero con vientos tan fuertes, de entre 54 y 60 kms/hora, y olas de metro y medio de altura, nadie con un poco de sentido de común, se atrevería a meterse incluso en un lago pequeño, y mucho menos en el Syamozero”, manifestó Alexander Hudilainen, Gobernador en la región de Carelia.
La tragedia ocurrió el sábado en la región fronteriza con Finlandia, a unos 400 kilómetros de San Petesburgo.
Diez de los casi 50 niños que navegaban lago a bordo de las embarcaciones procedían de Moscú.
El mal tiempo provocó que dos de los tres botes en los que viajaban volcaran. Nueve niños y dos adultos consiguieron ser rescatados, y otros
lograron salvar su vida nadando hacia las costas de las islas del lago.
Las tareas de rescate para la búsqueda de supervivientes continua.