Mientras que la comunidad internacional se inquieta respecto a la deriva autoritaria en Turquía, el Primer ministro Binali Yildirim jugaba la carta de la emoción al romper en lágrimas este lunes con l
Mientras que la comunidad internacional se inquieta respecto a la deriva autoritaria en Turquía, el Primer ministro Binali Yildirim jugaba la carta de la emoción al romper en lágrimas este lunes con la pregunta que le hacía su nieto en la noche del intento de golpe de Estado: ¿Por qué matan a la gente?”.
El brazo derecho del presidente Erdogan no se enterneció durante mucho tiempo y ha insistido en la extradición del clérigo Fethullah Gülen.
“Estaremos muy decepcionados si nuestros amigos estadounidenses siguen insistiendo en que tenemos que presentarles pruebas.”
Aunque presentar las pruebas necesarias para lanzar un proceso de extradición no parecen ser la prioridad del primer ministro turco, quien ha declarado que esta situación podría alterar la amistad entre Turquía y EE.UU.
El Gobierno turco persiste en acusar al antiguo aliado y ahora enemigo acérrimo de Recep Tayip Erdogan de ser el instigador de la tentativa de golpe de Estado.