Menos de 24 horas después del anuncio el ministro del Interior, Wolfgang Sobotka, ha dicho este martes que el edificio podría ser completamente remodelado hasta resultar…
Menos de 24 horas después del anuncio el ministro del Interior, Wolfgang Sobotka, ha dicho este martes que el edificio podría ser completamente remodelado hasta resultar irreconocible.
No quieren que la residencia, localizada en Braunau y desocupada desde hace cinco años, se convierta en un lugar de peregrinación para los neonazis.
“Lo principal para nosotros es que los neonazis y otros grupos no tengan un lugar donde concentrarse. Está claro que la arquitectura necesita cambiar de tal forma que ya no sea reconocible”, Sobotka.
El futuro de este edificio es, desde hace años, objeto de debate:
“Creo que es bueno que ciertos objetos sean destruidos cuando tienen una connotación negativa, pero derribar una casa funcional es algo que tendría que considerarse seriamente”, decía una austríaca.
Las críticas de los expertos sobre la demolición del edificio, que dicen es “tratar de borrar la historia”, podrían ser la razón por la que el Gobierno austríaco ha decidido cambiar de opinión y convocar un concurso de arquitectos para su remodelación.