Según fuentes militares, las tropas iraquíes han entrado en los barrios de Nabi Yunes y Al Yammaza, en el frente oriental, y Al Shurta, en el noreste, cerca del campus universitario que fue arrebatado
Según fuentes militares, las tropas iraquíes han entrado en los barrios de Nabi Yunes y Al Yammaza, en el frente oriental, y Al Shurta, en el noreste, cerca del campus universitario que fue arrebatado al Dáesh el pasado sábado.
La batalla por retomar el control total de la ciudad continúa y ante la imposibilidad de llegar a los principales cementerios de Mosul, los vecinos de los barrios recién liberados están enterrando a sus muertos en lugares como esta escuela de primaria.
“Incluso tras ser liberado, el Dáesh continúa teniendo este barrio como objetivo. Cualquier civil que no viva según sus normas es considerado como un apóstata. Los francotiradores del grupo Estado Islámico disparan y matan a los civiles que caminan por las calles. Aquí no tenemos cementerios y no podemos llegar a los que hay, así que hemos tenido que enterrar a la gente en esta escuela”, relata este hombre.
El Ejército iraquí asegura haber liberado el 90% del sector oriental de la ciudad, donde sus vecinos intentan recuperar la normalidad y borrar las huellas dejadas por el grupo Estado Islámico.
Esta silla de tortura es una muestra del horror vivido por los habitantes de Mosul durante los dos años y medio que han estado bajo el yugo de los yihadistas.