Los cimientos del gigante tecnológico Samsung tiemblan por el macroescándalo de corrupción en Corea del Sur.
PUBLICIDADLos cimientos del gigante tecnológico Samsung tiemblan por el macroescándalo de corrupción en Corea del Sur. La fiscalía ha decidido enviar a juicio al heredero del grupo, Lee Jae-yong, acusado de soborno junto a otros cuatro ejecutivos de la compañía.
Jae-yong, que tomó las riendas de Samsung en octubre tras el ataque cardiaco sufrido por su padre, ya lleva en prisión desde mediados de mes. Según el portavoz de la fiscalía, la propia presidenta Park podría también ser acusada en relación con estos cargos por soborno.
Samsung es un enorme conglomerado industrial, el mayor de Corea del Sur, que ha crecido al calor de sus vínculos con el poder político. A raíz del escándalo, el grupo ha anunciado una profunda remodelación interna.
El heredero de la familia Lee está acusado de haber pagado millones de euros a entidades supuestamente controladas por la amiga de la presidenta Choi Soon-sil, conocida como la “Rasputina” surcoreana. Este caso ha sacado a la luz un entramado político-económico en el estarían involucrados, además de la jefa de Estado, miembros del Gobierno y los principales conglomerados del país.
Las manifestaciones masivas de diciembre llevaron a la destitución de la presidenta Park por el Parlamento, pero la decisión final está en manos del Tribunal Constitucional, que tiene seis meses para pronunciarse.