Alegría en el cuartel general de Rustavi TV, la mayor cadena de televisión georgiana, crítica con el Gobierno.
Alegría en el cuartel general de Rustavi TV, la mayor cadena de televisión georgiana, crítica con el Gobierno.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha extendido de manera indefinida la supensión de la devolución del canal a su antiguo propietario, Kibar Khalvashi, un poderoso hombre de negocios próximo al actual ejecutivo. La decisión de la justicia europea paraliza, por tanto, la transferencia de propiedad a Khalvashi ordenada por la Corte Suprema de Georgia la semana pasada tras una larga batalla judicial.
La dirección de la cadena denuncia una maniobra del Gobierno para silenciar a un medio crítico utilizando a Khalvashi como tapadera.