Un mal necesario es lo que llevó al director del FBI a investigar a Hillary Clinton cuando solo quedaban once días para las elecciones.
Un mal necesario es lo que llevó al director del FBI a investigar a Hillary Clinton cuando solo quedaban once días para las elecciones. Así se ha defendido James Comey ante el comité judicial del Senado.
La reapertura de las pesquisas, según Comey, se produjo tras haber encontrado miles de correos electrónicos de los primeros tres meses de Clinton como secretaria de Estado en el ordenador del exmarido de una de sus principales asesoras, Huma Abedin.
“Es terrible, tengo náuseas al pensar que podríamos haber tenido algún impacto en las elecciones, pero honestamente, no cambiaría la decisión. En mi opinión hubiera sido catastrófico, no sólo para el FBI, sino mucho más allá”, ha explicado el responsable de la agencia.
Hillary Clinton afirmó que su derrota ante Trump había sido provocada por Wikileaks, el director del FBI y Rusia, a quien Comey no ha querido exonerar de ninguna culpa ante los senadores demócratas: “Desde mi punto de vista, es la mayor amenaza para cualquier nación en la Tierra dadas sus intenciones y su capacidad.”
El FBI descartó presentar cualquier imputación criminal contra la candidata presidencial mientras todavía continúa la investigación anunciada públicamente el pasado mes de marzo sobre la influencia del Kremlin en la campaña a favor de Donald Trump. La resolución, en cualquier caso, llegará tarde al menos para los demócratas.