Los bomberos de Los Ángeles controlan ya el 30% del enorme incendio que desde el viernes arrasa la zona norte de la ciudad.
Más de mil efectivos luchan contra las llamas. La lluvia y las bajas temperaturas han permitido la reapertura de las carreteras de la zona y la vuelta a casa de las 700 familias que habían sido evacuadas.
“Las temperaturas seguirán bajando en los próximos días y esto es una buena noticia. También aumentará la humedad. Hemos realizado grandes progresos y seguiremos trabajando para controlar el incendio”, ha explicado Ralph Terrazas, jefe del Departamento de Bomberos de Los Ángeles.
Se trata del mayor incendio que ha sufrido la ciudad de Los Ángeles respecto a la extensión de la zona afectada, unas 2 400 hectáreas.
Tres casas han sido destruídas por las llamas y una cuarta vivienda ha resultado gravemente dañada.