Al menos una persona ha muerto y varias han resultado heridas en Moscú tras la gran nevada que cayó durante el pasado fin de semana. El peso de la nieve derribó más de dos mil árboles, provocando numerosos cortes de tráfico.
Pocas veces es noticia que nieve en Moscú. Sin embargo, hay excepciones que rompen la regla al tiempo que rompen registros históricos. La que ha sido bautizada como la "nevada del siglo" ha sepultado las calles de la capital rusa bajo medio metro de nieve. Un espeso manto blanco que ha sorprendido a los habitantes de esta urbe de 12 millones de habitantes que está más que acostumbrada a lidiar con este tipo de problemas.
Desde el sábado, los equipos de emergencia no dan abasto. El temporal ha derribado más de 2.000 árboles, provocando la muerte de un persona e innumerables cortes de tráfico. El Ministerio de Situaciones de Emergencia ha aconsejado a los conductores que eviten, en la medida de lo posible, utilizar sus vehículos. Mientras que en las pocas carreteras utilizables se rueda a paso de tortuga, cientos de vuelos han sufrido retrasos o han sido anulados.