Este jueves fue la capital, San Juan, la que se qued´ó a oscuras. Los cortes de luz son muy frecuentes desde el paso del huracán María, que destruyó dos tercios de la red eléctrica hace seis meses. Los comerciantes hacen lo que pueden para seguir con sus negocios.
Puerto Rico sigue quedándose a oscuras, en algunos sitios a diario, casi seis meses después del paso del huracán María.
Este jueves, un nuevo apagón al mediodía dejó sin electricidad la capital, San Juan, junto a municipios vecinos como Caguas y Carolina.
Casi un millón de personas vive en ellos. Los comerciantes afectados ven impotentes cómo pierden clientes, mientras hacen lo que pueden para seguir adelante.
"Había dos cruceros. Los turistas pasaban, veían el restaurante a oscuras y se iban, no entraban porque estábamos a oscuras, no teníamos energía", cuenta Héctor Andújar, propietario de un restaurante.
"Invertimos un poquito en máquinas de batería, de esas que se cargan, y con eso mientras nos dure la carga, rezando para que llegue la luz antes de que se nos acabe la carga", comenta Roberto Colón, dueño de una peluquería.
El apagón ha dejado las calles sin semáforos y decenas de barrios sin agua corriente.
La autoridad eléctrica de la isla asegura que las plantas de Palo Seco y San Juan cerraron para proteger el sistema. Según medios locales, la avería fue localizada al sur de la isla. Por la tarde, la electricidad ya había conseguido ser restaurada en el aeropuerto internacional y varios hospitales.
Un quince por ciento de los abonados nunca ha vuelto a tener luz cespués del huracán, que destruyó dos tercios de la red eléctrica de este estado libre asociado de EEUU.