El diputado opositor venezolano Winston Flores denunció este miércoles que un grupo de aproximadamente 30 personas intentó irrumpir en el hemiciclo de sesiones del Parlamento, de mayoría opositora, cuando estaba por comenzar la asamblea ordinaria de hoy.
PUBLICIDADEl diputado opositor venezolano Winston Flores denunció este miércoles que un grupo de aproximadamente 30 personas intentó irrumpir en el hemiciclo de sesiones del Parlamento, de mayoría opositora, cuando estaba por comenzar la asamblea ordinaria de hoy.
"Intento de un grupo de 30 personas identificadas como sindicato chavista intentaron irrumpir en el hemiciclo de sesiones cuando estaba la sesión en pleno desarrollo #AsambleaNacional seguimos la sesión con fuerza y determinación", dijo Flores en su cuenta de Twitter.
El parlamentario añadió en otro mensaje que uno de los que integraba el grupo amenazó a un trabajador de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) con un arma de fuego.
En imágenes transmitidas por el canal en línea VPI se observó un forcejeo entre un grupo y el personal de seguridad del hemiciclo, mientras algunas personas gritaban que habían acudido hasta el lugar para pedir "la paz" y la "no intervención" al país a propósito de la presión internacional que hay contra el gobernante Nicolás Maduro.
Algunos diputados salieron del hemiciclo para mediar en la situación que se ha presentado en al menos dos oportunidades desde que la oposición tomó el control del Parlamento en 2015.
En esas ocasiones diputados y personal de la institución han resultado heridos, pero hasta el momento en el suceso ocurrido este miércoles no se han reportado lesionados.
Según medios, el grupo de chavistas ya se retiró del Legislativo.
El Parlamento venezolano tiene previsto debatir hoy un informe de la comisión de seguimiento a la ayuda humanitaria que se acopia en Colombia, Brasil y en la isla de Curazao y que fue bloqueada el sábado por funcionarios del Gobierno de Nicolás Maduro cuando se esperaba su ingreso.
Maduro ha asegurado que permitir el ingreso de estas donaciones, con las que se busca atender a al menos 250.000 personas en vulnerabilidad, podía dar paso a una invasión extranjera y ante ello ordenó el cierre de las fronteras terrestres con Brasil y Colombia, así como las vías marítimas.
La ayuda humanitaria fue solicitada por el jefe del Parlamento y proclamado presidente interino del país, Juan Guaidó, ante la escasez de medicinas y alimentos que se registra desde hace cinco años y ha sido una de sus principales armas de presión contra el Gobierno de Maduro al que considera ilegítimo.
Pese al bloqueo, la oposición venezolana aseguró que logró ingresar unas 50 toneladas por el sur del país, donde limita con Brasil.