Las temperaturas en la capital alcanzan los 35 grados centígrados en vísperas de los picos anunciados para jueves y viernes
Un buen chorro de agua ha sido uno de los bienes más preciados en Madrid este miércoles, cuando ha dado comienzo una ola de calor que ha hecho subir el mercurio de los termómetros hasta los treinta y cinco grados. El Gobierno regional ha elevado a nivel uno la alerta por las altas temperaturas. Y a la situación meteorológica en el centro de la capital española se podrían sumar en una semana las consecuencias de eliminar Madrid Central y, como consecuencia. el aumento del tráfico. Las altas temperaturas no empezarán a remitir como mínimo hasta el lunes.
"Treinta y cinco grados centígrados. Esa ha sido la temperatura pasadas las cuatro de la tarde en el barrio del Lavapiés de la capital española y en vísperas de los picos anunciados para el jueves y el viernes. El Gobierno de la Comunidad ha puesto en marcha el protocolo indicado para este tipo de situaciones. La climatología extrema puede hacer sudar al nuevo alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ya que podría incrementar la contaminación, y el sábado hay convocada una manifestación contra el fin de Madrid Central. La restricción del tráfico en el centro de la ciudad fue implementada por Manuela Carmena y su derogación es una de las medidas estrella del nuevo regidor popular", concluye Carlos Marlasca, corresponsal de Euronews.