Más de mil eurodiputados de diferentes formaciones políticas han expresado su firme oposición al plan de Israel de anexionar partes de Cisjordania en una carta publicada el miércoles.
Más de mil eurodiputados de diferentes formaciones políticas han expresado su firme oposición al plan de Israel de anexionar partes de Cisjordania en una carta publicada el miércoles.
Los parlamentarios expresan "serias preocupaciones" sobre el plan de Estados Unidos para poner fin al conflicto palestino-israelí que permitiría a Israel anexar el 30% del territorio de Cisjordania.
"Estamos profundamente preocupados por el precedente que esto sentaría para las relaciones internacionales en general", afirma la carta, advirtiendo de las "consecuencias proporcionales" que podría provocar tal medida.
"Nos preocupan profundamente las repercusiones de la anexión en la vida de israelíes y palestinos, así como su potencial desestabilizador en una región a las puertas de nuestro continente.
"Europa debe tomar la iniciativa de reunir a los agentes internacionales para evitar la anexión y salvaguardar las perspectivas de la solución de dos Estados y una solución justa del conflicto", añade.
La carta, firmada por 1.080 parlamentarios europeos de 25 países, fue iniciada por cuatro prominentes figuras israelíes, entre ellas Avraham Burg, ex presidente del Knesset, y Michael Ben-Yair, exfiscal general de Israel.
Argumentan que el plan de Visión para la Paz presentado por la administración del presidente Donald Trump de Estados Unidos "se aparta de los parámetros y principios acordados internacionalmente".
"Promueve efectivamente el control permanente de Israel sobre un territorio palestino fragmentado, dejando a los palestinos sin soberanía y dando luz verde a Israel para anexar unilateralmente partes significativas de Cisjordania", continuaron.
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ha dicho que la anexión se someterá a votación el 1 de julio.
El plan de paz de Trump ha sido muy criticado por ser demasiado amistoso con Israel - la Autoridad Palestina boicoteó las conversaciones.
Según el plan, un futuro estado palestino sería más pequeño de lo que se imaginaba, con varias partes desconectadas entre sí. También reduce la definición de lo que constituye un "refugiado palestino" - reduciendo así el acceso a la ayuda - y prohíbe que un futuro Estado palestino tenga fuerzas de seguridad.
Los firmantes de la carta señalaron que el jefe de la Diplomacia europea, Josep Borrell, ha dicho que la anexión israelí de territorio de Cisjordania "no puede pasar sin ser cuestionada" y advirtieron que "la falta de respuesta adecuada animaría a otros estados con reivindicaciones territoriales a ignorar los principios básicos del derecho internacional".
Su llamamiento se produce un día después de que más de 100 legisladores de la UE e Israel enviaran una carta a Borrell instándole a "renovar el trabajo del Consejo de Asociación UE-Israel y reanudar sus actividades con reuniones periódicas lo antes posible".
El Consejo no se ha reunido desde 2012 debido a desacuerdos sobre el proceso de paz.