El nacionalista Ersin Tatar defiende la independencia y no una solución federal como la que proponía su contricante el centro-izquierdista Mustafa Akinci
Una victoria que dificulta la reunificación de la isla de Chipre, la del candidato del presidente Erdogan, Ersin Tatar, como líder de la República Turca del Norte de Chipre.
Los turcochipriotas escogieron a este político nacionalista, que con el 51% por ciento de los votos ganó al hasta ahora presidente, el centro-izquierditsa Mustafa Akinci que reunió el 48% de los votos.
"Merecemos la independencia"
En su primer discurso, tras la victoria, Tatar dejó claras sus intenciones.
"Somos la voz de los turcochipriotas. Merecemos la independencia. Somos luchadores. Luchamos por existir dentro de la Republica del Norte de Chipre. En consecuencia, nuestros vecinos del sur y la comunidad internacional deben respetar nuestro combate por la libertad".
Un llamamiento a las instancias internacionales que solo reconocen al Gobierno griego de la isla, que forma parte de la Unión Europea desde 2004. Tan solo Ankara reconoce la República Turca del Norte de Chipre.
El presidente saliente y candidato perdedor, Mustafa Akinci, abogaba por una solución federal en la isla dividida desde 1974, Akinci que ha anunciado que abandona la politica, dice que su derrota se debe a ingerencias exteriores; una velada alusión a Ankara.
Tan sólo unos días antes de la primera vuelta, en la que también llegó en cabeza; Tatar viajó a Turquia para obtener la apertura de la playa de Varosha que estaba cerrada desde hace 46 años.
Este logro de Tatar desató las protestas de los grecochipriotas y viola una resolución de la ONU, pero le valió el apoyo del electorado turcochipriota.