Alemania es el quinto país de Europa con la tasa más elevada de muertes por el coronavirus, después del Reino Unido, Italia, Rusia y Francia. Merkel trata de aprobar un proyecto de ley para poner un "freno de emergencia" en las regiones con mayor incidencia.
Alemania recuerda a los casi 80.000 fallecidos por la COVID-19 mientras trata de poner fin a la pandemia mediante la vacunación y el freno a los contagios.
En la Iglesia de la Memoria de Berlín, Alemania recuerda a los cerca de 80.000 muertos por la COVID-19. Al oficio ecuménico en honor a las víctimas, asistieron el presidente, Frank-Walter Steinmeier y la canciller Angela Merkel mientras el país activa remedios para poner fin a la pandemia mediante la vacunación y poniendo freno a los contagios.
"Hoy no nos fijamos en cifras y estadísticas sino en cada una de las personas que han fallecido y que han dejado un hueco en sus familias y en sus círculos de amigos, en el barrio, entre los compañeros y en nuestra sociedad. Y no volverán pero siguen en nuestra memoria, no los olvidamos. declaró solemne Frank-Walter Steinmeier, presidente de Alemania, quien asistió después a un evento musical conmemorativo en la Konzerthaus de Berlín, con la canciller Angela Merkel y otros altos funcionarios, que en la penumbra, se recogieron para ofrecer solidaridad y consuelo a los familiares y amigos que ni siquiera pudieron despedirse de sus seres queridos víctimas del coronavirus.
Alemania es el quinto país de Europa con la tasa más elevada de muertes por el coronavirus, después del Reino Unido, Italia, Rusia y Francia.
Merkel trata de aprobar un proyecto de ley para poner un "freno de emergencia'' en las regiones con mayor incidencia donde hay más de 100 nuevos casos semanales por cada 100.000 habitantes.