Por Gergely Szakacs y Krisztina Than
BUDAPEST, 10 dic - El Tribunal Constitucional de Hungría evitó el viernes pronunciarse sobre la primacía del derecho de la Unión Europea al decidir sobre una controvertida medida gubernamental contra la inmigración, evitando una crisis más profunda después de que una impugnación similar de Polonia enviara ondas de choque a toda Europa.
El tribunal está estudiando el recurso presentado por el Gobierno nacionalista de Viktor Orban contra la decisión del tribunal de la UE de que Budapest infringió las leyes de la UE destinadas a proteger a los refugiados al deportarlos a través de la frontera con Serbia.
La ministra de Justicia, Judit Varga, ha argumentado que la aplicación de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea haría que muchos inmigrantes se quedaran en Hungría de forma permanente.
El viernes, el máximo tribunal húngaro dijo que el Gobierno tenía derecho a aplicar sus propias medidas en los ámbitos en los que la UE aún no ha dado los pasos adecuados para la aplicación común de las normas comunitarias.
Sin embargo, eludió la cuestión clave consistente en determinar si la legislación de la UE tenía primacía sobre la húngara en lo que respecta a la postura del Gobierno en materia de inmigración, afirmando que la interpretación de la ley fundamental húngara no podía tener como objetivo anular una decisión del tribunal europeo.
Orban, uno de los más firmes opositores europeos a la inmigración procedente de Oriente Medio y Asia, dijo anteriormente que el Gobierno acataría la sentencia del Tribunal Constitucional.