El año pasado la tradicional fieste se suspendió por la pandemia
PUBLICIDADEn mitad de las comidas y cenas de la Navidad, los que que también usan ingredientes para una auténtica batalla campal.
En la localidad alicantina de Ibi, en España, se ha vuelto a celebrar tras la cancelación el pasado año por el coronavirus, la fiesta de 'Els Enfarinats, los enharinados.
"Tenía muchas ganas de poder disfrutar una vez más de esta fiesta. Ha cambiado un poco por el tema del COVID. Está todo un poco separado. Pero la verdad es que se disfruta mucho y que estábamos deseando que pasara", asegura una local.
La final de este año no se ha podido celebrar en la plaza de la ciudad vieja, como es habitual, por las restricciones se ha trasladado a las afueras. Pero lo importante es que ha tenido lugar, como explica un participante: "Es una fiesta del pueblo, es única en todo el mundo, tiene más de 250 años. Estas tradiciones no se pueden perder".
Un evento en el que al menos, la harina y los huevos no engordan como el turrón.