Las autoridades de Chile han habilitado al menos dos escuelas como albergues para alojar a los afectados
Es la imagen de la devastación. Todo un poblado de chabolas reducido a cenizas en la ciudad chilena de Iquique.
El aparatoso incendio se desató el lunes en el campamento irregular. 15 personas resultaron heridas por las llamas aunque, por suerte, no hubo que lamentar muertes.
Unas 400 personas se han quedado sin techo, 40 de ellos migrantes bolivianos. Nancy Rodriguez, recuerda que el incendio "empezó por un lado del pasaje de atrás sin pensar que iba a llegar a mi casa y ahora perdimos todo, somos más de cincuenta familias que perdimos todo."
"Se consumió todo yo no salvé nada de lo mio esta todo calcinado. Lo único que salve fue lo puesto y ropa de cama porque ya no podía sacar nada, el incendio se venía encima", cuenta Nelson Hernandez, otro de los residentes.
Las llamas se extendieron en pocas horas. El difícil acceso al asentamiento y los cortes en el suministro de agua dificultaron las labores de extinción.
Las autoridades de Chile han habilitado al menos dos escuelas como albergues para alojar a los afectados.