La excanciller de Alemania dice tener la conciencia tranquila respecto a sus esfuerzos para evitar la guerra en Ucrania.
Angela Merkel dice tener la conciencia tranquila respecto a sus esfuerzos para evitar la guerra en Ucrania, en su primera comparecencia desde que dejó el poder. Aunque no se hace reproches, sí se pregunta a menudo si "se podría haber evitado la tragedia".
"Es un ataque brutal, que desprecia el derecho internacional y no tiene excusa. (...) Lo que ha pasado, en mi opinión, no es solo inaceptable, sino un gran error por parte de Rusia", declaró.
La excanciller de Alemania resumió su política con respecto al Kremlin como "encontrar un modus vivendi en el que no estemos en guerra sino en el que intentemos coexistir a pesar de nuestras diferencias".
"Y la diplomacia no es mala si no tiene éxito... No creo que deba decir ahora que fue equivocada, y no me disculparé. (...) En retrospectiva, estoy contenta de no tener que culparme por no tratar de prevenir un suceso como este. Al contrario, afortunadamente me he esforzado lo suficiente junto con los sucesivos presidentes franceses y esto me da una cierta tranquilidad", aseguró.
Respecto a sus encuentros personales con Putin, Merkel señaló que "había un gran disenso, que se fue agravando". "En todos estos años no fue posible poner fin a la Guerra Fría", dijo.