Cerdeña echa de menos a los oligarcas rusos, ausentes por las sanciones a Moscú

Las sanciones contra Rusia han sido un desastre para algunos: es el caso de la Costa Esmeralda de Cerdeña, un destino de élite que ha sido literalmente colonizado a lo largo de los años por los oligarcas rusos. Allí han construido propiedades de lujo y atracado sus yates, llamados por la belleza de su playas, su gran clima y su excelente comida. Su ausencia durante la última temporada se nota ahora de forma muy significativa.
En Porto Cervo, por ejemplo, un hombre que trabajaba como chófer para un magnate ruso se quedó sin trabajo debido a las sanciones y, por miedo a comprometerse aún más, sólo ha accedido a ser entrevistado de forma anónima:
"Mi trabajo ha disminuido considerablemente debido a que estas personas no han venido este año", nos cuenta. "El daño se nos ha hecho a nosotros, a la gente de a pie. Los oligarcas tienen mucho dinero y se fueron de vacaciones a otro sitio".
Además de invertir en servicios e inmuebles, algunos oligarcas habían llegado a financiar administraciones públicas: al principio de la pandemia, el multimillonario ruso Alisher Usmanov donó medio millón a la región de Cerdeña. Pero con las sanciones, decenas de personas fueron despedidas, o vieron suspendidos sus trabajos por tiempo indefinido
"Esta gente no tiene ningún límite", desvela nuestro entrevistado. "Por lo que, para que sus vacaciones resultaran lo más lujosas posibles, contrataban a más gente de la que era necesaria".
La prohibición de los oligarcas en Porto Cervo ha dejado un reguero de villas y yates vacíos o incautados, así como toda un sector que se pregunta si podrá reactivarse y cuándo.