El Comité Olímpico Helénico asumió todos los gastos para que las gimnastas ucranianas pudieran acudir a la Copa del Mundo de Gimnasia en Grecia.
El deporte puede trascender la política, cruzar fronteras, unir a los pueblos, e incluso, en ocasiones, curar heridas. El equipo nacional de gimnasia de Ucrania es todo un ejemplo de ello.
El Comité Olímpico Helénico asumió todos los gastos para que las gimnastas ucranianas pudieran acudir a la Copa del Mundo de Gimnasia en Grecia. Y aunque estuvieran preparadas para competir en Atenas, las jóvenes no dejan de estar preocupadas por el conflicto.
Diana Baieva, gimnasta ucraniana, dice: "Cuando en 2022 Rusia lanzó la gran invasión de tierras ucranianas, mi padre no tuvo más remedio que ir a luchar. Quería proteger a nuestra familia y a nuestra Ucrania. Estamos muy preocupados por él. Pero creemos que todo irá bien y al final venceremos".
El equipo nacional ucraniano viaja constantemente para los torneos, pero por motivos de seguridad, cuando es posible no regresa a Kiev. Las atletas confiesan que en el último año han recibido el apoyo y el cariño de casi todo el mundo.
"Hubo muchas chicas que nos apoyaron e intentaron estar a nuestro lado. La mayoría de los países europeos nos ayudaron y nos están ayudando económicamente para ir a los Juegos. Por supuesto, las gimnastas de Rusia y Bielorrusia no nos dirigieron la palabra y no dijeron nada para apoyarnos. De hecho, nos acusaron porque participamos en competiciones y ellos no", cuenta la gimnasta Yeva Meleshchuk.
Estas jóvenes deportistas rebosan pasión por su disciplina. Su entrenadora afirma que a pesar de las interrupciones por culpa de las sirenas por ataques aéreos, sus chicas nunca se han dejado intimidar por el conflicto. Una situación bastante habitual en Kiev desde hace más de un año.
Mariia Vysochanska, gimnasta del equipo nacional ucraniano, declara: "Kiev es ahora gris, sombría y triste. Esto se debe a que son frecuentes las sirenas de ataque aéreo y los impactos de misiles en casas y edificios de apartamentos. Hace poco cayó un cohete a 500 metros de nuestro gimnasio. Valoramos cada minuto que entrenamos y estamos muy contentos de que las fuerzas armadas nos protejan y hagan todo lo posible por ganar."