La decisión de la justicia hongkonesa fue influenciada por la falta de acuerdo respecto a la deuda sustraída por el grupo inmobiliario.
El Tribunal Superior de Hong Kong ordenó al gigante inmobiliario chino Evergrande, la promotora de bienes raíces más endeudada del mundo, liquidar su filial en el territorio tras un intento fallido de reestructurar 300.000 millones de dólares adeudados a bancos y tenedores de bonos, lo que avivó los temores sobre el creciente endeudamiento en el gigante asiático.
Evergrande Group es la más grande de una serie de promotoras chinas que han quebrado desde 2020 bajo la presión de las autoridades de que controlen su deuda, que el Partido Comunista, que gobierna el país, considera una amenaza para el deslucido crecimiento económico chino.
Pero la campaña contra el endeudamiento excesivo ha sumido al sector en una crisis y lo ha convertido en un lastre para la economía, ya que decenas de otras compañías se vieron en problemas y sus dificultades tuvieron eco en sistemas financieros dentro y fuera de China.
Los mercados financieros globales se habían visto remecidos antes por el temor a que Evergrande pudiera causar un revés global. Pero los reguladores chinos dijeron que los riesgos podían contenerse. Apenas unos pocos miles de millones de dólares de la deuda de Evergrande eran con acreedores extranjeros.
Caída de acciones
La jueza Linda Chan dijo que era apropiado que la corte ordenara a Evergrande que cerrase su negocio dada la “falta de progresos por parte de la compañía para presentar una propuesta viable de reestructuración”, así como la insolvencia de la firma.
No estaba claro cómo afectaría la orden de liquidación al sistema financiero chino.
Las acciones de Evergrande en Hong Kong cayeron casi un 21% el lunes por la mañana antes de que se suspendiera su cotización. Pero el índice de referencia hongkonés Hang Seng ganó un 0,9% y otras promotoras de bienes raíces subieron.