En una entrevista exclusiva con 'Euronews', el ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, acusa a la Unión Europea de financiar organizaciones que "boicotean a Israel" y critica a Ursula von der Leyen por "no preocuparse por los judíos vivos".
La Unión Europea es una "institución que tolera dos tipos de judíos: los dispuestos a socavar Israel y los judíos muertos", asegura a 'Euronews' el ministro israelí de Asuntos de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, en una entrevista exclusiva, días después de que la Comisión Europea propusiera sanciones a Israel por su actual asalto militar en Gaza.
En su discurso anual sobre el Estado de la Unión la semana pasada, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció que la UE suspenderá el "apoyo bilateral" a Israel y aplicará una suspensión parcial al acuerdo comercial. La medida responde, según sus palabras, a la "hambruna provocada por el hombre" en Gaza y a lo que calificó como "un claro intento" de Israel de "socavar la solución de dos Estados".
Von der Leyen propuso la suspensión de "todos los pagos" a Israel, excepto los destinados al Centro Mundial Yad Vashem para la Memoria del Holocausto y a otros proyectos de la sociedad civil. "La Unión Europea es una institución que vierte cientos de millones en organizaciones que nos acusan de genocidio y piden el boicot de Israel, sólo para lanzar ella misma boicots y etiquetar productos israelíes basándose en esos mismos informes", dice Chikli a 'Euronews'. "Apoyar a Yad Vashem le importa a Ursula von der Leyen. Los judíos vivos no significan nada para ella".
"Insto a todos los judíos a abandonar Bélgica sin demora"
Más de un centenar de rabinos europeos enviaron a principios de esta semana una carta a la presidenta Ursula von der Leyen, en la que advertían que, desde el ataque perpetrado por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, Europa enfrenta un "odio antisemita visceral" y que es urgente adoptar "mayores medidas de seguridad".
A principios de esta semana, en la ciudad alemana de Flensburgo, un comerciante causó indignación generalizada tras colocar una nota en su escaparate en la que se leía: "¡Los judíos tienen prohibida la entrada aquí! No es nada personal. No es antisemitismo. Simplemente, no os soporto".
El jueves por la noche, una reunión de políticos de centro-derecha en la ciudad de Lieja para conmemorar la muerte de Jean Gol, destacado político judío, se tornó violenta con 12 policías heridos, según informes, en manifestaciones en las que participaron 400 personas, muchas de ellas estudiantes que arrojaron petardos y manzanas podridas a los participantes, y los llamaron "cómplices del genocidio" en Gaza.
Según la UNIA, la institución pública independiente belga que promueve la igualdad y lucha contra la discriminación, 277 personas señalaron actos antisemitas y se abrieron 79 investigaciones en 2024, frente a 59 en 2023. La Comisión Europea condenó el viernes a "aquellos que están importando" la guerra de Gaza a Europa y "reforzará" su protección de los ciudadanos judíos, declaró a 'Euronews' un portavoz de la Comisión.
"Los judíos deben sentirse seguros en toda Europa", afirma Amichai Chikli, pero asegura que para algunos países ya es "demasiado tarde". "Europa se encuentra en una encrucijada: o libra una guerra sin concesiones contra el islam radical, o se rinde. Bélgica ya se ha rendido; no tiene futuro, ni esperanza, e insto a todos los judíos a que abandonen ese desdichado país sin demora".
"En cuanto a Reino Unido y Francia, hay lugar para un cauto optimismo. Parece que los pueblos británico y francés aún no han dicho su última palabra. Los puntos brillantes de la Europa actual son Hungría y la República Checa, unidas por una política de inmigración sensata".