El bombardeo a estas cuatro embarcaciones, con un superviviente rescatado por las autoridades mexicanas, se suma a las anteriores acciones extrajudiciales en aguas internacionales contra presuntas embarcaciones dedicadas al narco. La Casa Blanca sigue sin aportar pruebas y ya acumula 57 muertos.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ha anunciado que el Ejército estadounidense ha llevado a cabo tres ataques el lunes en aguas del Pacífico Oriental contra cuatro embarcaciones sospechosas de transportar drogas, dejando 14 muertos y un superviviente.
Esta es la primera vez que se han anunciado varios ataques en un solo día. Aunque, de nuevo, se desconoce la localización exacta del ataque, Hegseth ha apuntado que son las autoridades mexicanas quienes han coordinado el rescate de la única persona que ha sobrevivido al bombardeo de la embarción. En otro ataque a principios de octubre, en el que hubo dos supervivientes, el Ejército estadounidense rescató a la pareja y posteriormente los repatrió a Colombia y Ecuador, sin que recibiesen un proceso judicial.
Hegseth ha declarado lo siguiente en la red social X: "Nuestros servicios de inteligencia conocían las cuatro embarcaciones, que transitaban por rutas conocidas del narcotráfico y transportaban narcóticos". El número de muertos en los 13 ataques revelados desde principios de septiembre asciende a, como mínimo, 57 personas. Todas las cifras han sido confirmadas por el Ejecutivo de Trump, sin una verificación independiente o un rastreo de otros posibles desaparecidos.
La Administración republicana sigue sin presentar ninguna prueba que respalde sus afirmaciones sobre los barcos, su conexión con los cárteles de la droga o incluso la identidad de las personas fallecidas en estos ataques, realizados en aguas de Sudamérica, tanto en el Pacífico como en el Caribe, y ahora en América del Norte.
Tanto republicanos como demócratas han reclamado transparencia a la Casa Blanca sobre estas operaciones: se desconoce dónde ocurren exactamente los bombardeos, quienes son los patrones de las embarcaciones, así como sus tripulantes, y bajo qué cargos se les bombardea fuera de la jurisdicción estadounidense.