El ataque marca la segunda noche consecutiva en la que Rusia ataca la ciudad portuaria del sur de Ucrania, dañando instalaciones y provocando incendios, según informaron las autoridades el viernes.
Por segunda noche consecutiva, un ataque ruso con aviones no tripulados golpeó la ciudad portuaria de Odesa, en el sur de Ucrania, durante la noche del viernes, provocando un incendio y dañando las infraestructuras energéticas y portuarias.
"Los ataques aéreos causaron nuevos daños en las instalaciones de infraestructuras energéticas y portuarias. Se declararon incendios, edificios administrativos, equipos y maquinaria resultaron dañados", escribió en Telegram el gobernador regional, Oleh Kiper. No se registraron heridos ni víctimas mortales, según Serhii Lysak, jefe de la administración militar regional, que aseguró que los servicios de emergencia se encontraban sobre el terreno.
"Los ingenieros eléctricos están trabajando para restablecer el suministro eléctrico a los hogares de los residentes de Odesa", escribió Lysak en Telegram. Se trata del segundo ataque consecutivo contra la ciudad, ya que un día antes Rusia lanzó otro ataque nocturno contra instalaciones portuarias e industriales, que causó un muerto y dos heridos.
"Odesa es la que más sufre estos días. Rusia destruye deliberadamente las infraestructuras energéticas y civiles, dejando a la gente sin electricidad, agua ni calefacción en medio de temperaturas bajo cero", escribió el jueves en X el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Andrii Sybiha.
Durante la noche del viernes, Rusia lanzó 99 drones y un misil balístico Iskander-M contra Ucrania, según informó la Fuerza Aérea ucraniana. Un total de 73 drones fueron derribados o bloqueados, mientras que el misil Iskander y 26 vehículos aéreos no tripulados alcanzaron 16 puntos de Ucrania.
Por otra parte, Ucrania afirmó haber atacado el jueves una importante refinería de petróleo rusa utilizando misiles Storm Shadow suministrados por el Reino Unido. El Estado Mayor ucraniano declaró que sus fuerzas habían atacado la refinería de Novoshakhtinsk, en la región rusa de Rostov. "Se registraron múltiples explosiones. El objetivo fue alcanzado", escribió en Telegram.
Los ataques ucranianos con drones de largo alcance contra refinerías rusas pretenden privar a Moscú de los ingresos por exportación de petróleo que necesita para proseguir su invasión a gran escala.