Dolce & Gabbana volvieron a sorprender en la apertura de la Semana de la Moda Masculina de Milán.
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Dolce & Gabbana volvieron a sorprender en la apertura de la Semana de la Moda Masculina de Milán. La pareja italiana tiró de los clásicos intemporales para presentar a ritmo de jazz al más puro estilo de Nueva Orleans su colección primavera-verano 2017.
Mucho blanco y negro, pantalones por encima de los tobillos, lentejuelas, cuadros y muchas rayas fueron la marca de esta nueva colección.
Contrastando con el glamuroso clasicismo hollywoodiense del dúo italiano, apareció en Milán el desenfado rompedor de Dean and Dan Caten. Los canadienses responsables de Dsquared combinaron la estética skin de cintura para arriba con el glam en pantalones, zapatos y plataformas.
Lentejuelas, purpurina y mucho hedonismo para celebrar el buen estado de forma en el que se encuentran estos dos gemelos.
Como no podía ser de otra forma, Donatella Versace quiso rendir homenaje a su desaparecido amigo del alma.
La diseñadora italiana abrió su desfile con una canción inédita de Prince. Las notas de un tema que el genio de Minessotta compuso para ella y que acompañaron a la vaporosidad y fluidez de las prendas de Donatella.
Como no podía ser de otra forma, la diseñadora cerró el desfile vestida de púrpura.
Otro desfile que no defraudó fue el de Prada. La firma milanesa sorprendió al público el domingo con una instalación rebuscada y sombría. El espacio parecía con sus rejas, una prisión pero los colores de su nueva colección ultradeportiva trajeron algo de luz al claustrofóbico escenario.
Prada apostó por sombreros vaqueros o de pescador, diademas para sujetar el pelo y sandalias de goma desgastadas de colores vivos con calcetines.