Reciclando barcas rotas en nuevos sueños: Dos jóvenes cooperantes alemanas decidieron reciclar el material de los botes de goma, cargados de significado, en bolsos y mochilas, símbolo de un nuevo comienzo.
Millones de inmigrantes han llegado a Europa en botes de goma inflables. Lanchas neumáticas repletas de refugiados con sus historias y sueños, que a veces tienen un trágico final.
Transformar esas barcas rotas y abandonadas a la orilla del mar en otra cosa, fue la idea que tuvieron dos jóvenes alemanas cooperantes en la isla griega de Chios para ayudar a los refugiados.
Decidieron reciclar ese material, cargado de significado, en bolsos y mochilas, símbolo de un nuevo comienzo.
"La gente que llega a las costas de Europa son gente como tú y como yo, personas con talento, que tenían sus trabajos en sus países de origen. Así que queríamos hacer algo que diera cuenta de ello. Y pensamos que trabajar con esas personas y mostrar su talento sería la mejor forma de hacerlo", explica Vera Günther, cofundadora de Mimycri.
Gracias a una campaña solidaria y a una ayuda inicial de 40.000 € del Gobierno alemán pudieron alquilar este taller. El resultado es una firma de moda sostenible que da trabajo en Alemania a refugiados de Siria y Pakistán.