Portugal declara el estado de alerta por el riesgo de incendios forestales ante temperaturas de hasta 44°C, mientras España afronta su segunda ola de calor del verano que ya ha causado la muerte de un anciano en Badajoz. El norte de Europa también sufre temperaturas récord.
La segunda ola de calor del verano ha cobrado su primera víctima: un hombre de 85 años de Badajoz que ha fallecido este lunes en el Hospital Perpetuo Socorro de la capital pacense a consecuencia de las altas temperaturas. El segundo episodio de calor extremo del verano en España comenzó el domingo y se prevé que dure toda la semana.
Se espera que las temperaturas en Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha y Galicia superen los 40°C, y que algunas zonas como el valle del Guadalquivir alcancen los 42°C. El Ministerio de Sanidad español ha emitido una alerta roja para cientos de municipios. La ola de calor, tanto en Portugal como en España, alcanzará su máxima intensidad el lunes y el martes.
Portugal entró el domingo en estado de alerta por el riesgo creciente de incendios forestales, en medio de un fuerte calor sobrevenido por la nueva ola de calor. Se espera que las temperaturas oscilen entre los 36°C y los 44°C.
La ministra del Interior lusa, Maria Lúcia Amaral, ha declarado que se prohibirá el acceso, la circulación y la permanencia en los espacios forestales, de acuerdo con los planes de defensa contra los incendios. También estarán prohibidos los fuegos artificiales, la realización de trabajos y el uso de maquinaria, así como la quema de objetos, mientras el país se enfrenta a este nuevo episodio de calor extremo.
Cinco distritos del norte del país estarán en alerta roja el lunes y el martes. Todos los restantes estarán en alerta naranja, excepto el distrito de Faro, que estará en alerta amarilla. La situación de alerta máxima durará hasta el jueves. Los incendios forestales siguen causando estragos en el norte de Portugal y al menos un pueblo de la región del Duero tuvo que ser evacuado este domingo.
Los típicamente fríos países nórdicos también están siendo abrasados por una ola de calor "verdaderamente sin precedentes". Según los científicos, la región ha sufrido la ola de calor más larga desde la década de 1960, con temperaturas que han superado regularmente los 30°C. Finlandia superó esta marca durante tres semanas seguidas en julio. El Instituto Meteorológico de Noruega señala que se han registrado temperaturas superiores a los 30°C en 12 días de julio en los condados más septentrionales del país.
En el este de Polonia también se emitieron alertas por tormentas, lluvias y calor durante el fin de semana. Se prevé que fuertes vientos de hasta 80 km/h y granizo azoten algunas zonas del país. Los avisos más graves se han emitido para zonas de Warmia-Masuria, Masovia, Lublin y Subcarpacia. Las tormentas en estas zonas irán acompañadas de fuertes precipitaciones de hasta 45mm. Las autoridades también advierten de condiciones idóneas para que se forme otra ola de calor, con temperaturas en las regiones afectadas que se espera que ronden los 30°C.
En cambio, el largo periodo de tiempo inestable que ha caracterizado el verano italiano de este año está llegando a su fin. Tras las olas de calor que han asolado todo el país, las tormentas están afectando ahora a varias regiones, sobre todo las situadas a lo largo de la costa adriática. Un hombre de 70 años ha sido alcanzado por un rayo en una playa de Piombino durante una tormenta. Este se salvó gracias a la intervención de los servicios de rescate, y su corazón empezó a latir de nuevo tras 30 minutos de reanimación. A continuación fue trasladado en helicóptero a un hospital local.