La curiosidad por los timones, dicen los científicos, ha llevado a las orcas a acercarse a las embarcaciones que navegan junto a las costas lusas y españolas en los últimos cinco años, pero rechazan que se trate de ataques.
Las interacciones entre orcas y embarcaciones frente a las costas de la Península Ibérica, registradas por las autoridades desde 2020, continúan vigentes mientras los científicos investigan (y la opinión pública debate) a qué se debe este comportamiento. El más reciente ocurrió el 23 de septiembre frente a Vila do Conde, en el norte de Portugal, cuando un velero francés perdió el timón tras un encuentro de este tipo.
El incidente se produjo dos semanas después de que otro barco se hundiera frente a la Costa da Caparica -a unos kilómetros al sur de la bahía del Tajo en Lisboa- el 13 de septiembre, tras el acercamiento de un grupo de cuatro orcas. Las autoridades lusas han monitorizado otros dos naufragios causados por estos cetáceos en 2022: uno frente a la costa de Viana do Castelo y otro frente a la costa de Sines. Desde el inicio de este fenómeno, ninguno de los incidentes con embarcaciones se ha saldado con víctimas o heridos, registrándose únicamente daños materiales importantes.
Solo este año, la Marina y la Autoridad Marítima Nacional portuguesas han tenido constancia de casi 60 encuentros entre orcas y embarcaciones frente a las costas portuguesas, según datos del Instituto Hidrográfico. "Durante 2025, hubo 30 avistamientos y 24 interacciones", resume ante 'Euronews' el comandante João Ferraz Fernandes, de la Autoridad Marítima Nacional.
¿Ataques o juegos de una especie extremadamente inteligente?
El comportamiento de estos mamíferos, que pueden llegar a alcanzar las 11 toneladas de peso, ha causado cierta inquietud, pero la comunidad científica cree que su objetivo es jugar, no atacar. "Tenemos que ver esto casi como el juego de la cuerda: una tira para un lado, la otra tira para el otro. Al jugar con el timón, están cambiando la dirección del barco y parece que esto les despierta interés", explica el biólogo marino Rui Rosa en declaraciones a 'Euronews'.
Este investigador y profesor asociado de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa rechaza la idea de un comportamiento agresivo, ya que se trata de animales de gran tamaño. "Si realmente quisieran comportarse de forma agresiva, sería a otra intensidad, a otra escala", afirma.
El problema es que, con los años, más integrantes de la especie han aprendido este 'juego', dadas las altas capacidades cognitivas de las orcas y su comportamiento gregario. Lo que inicialmente comenzó con unas pocas, ahora lo hace un número mucho mayor de individuos de la población. "Hablamos de entre 15 y 20 individuos", admite Rosa.
¿Qué se puede hacer para evitar un incidente cuando se acerca una orca?
El Instituto de Conservación de la Naturaleza y los Bosques (ICNF) portugués ha establecido un protocolo de seguridad con comportamientos a adoptar en caso de que las orcas se acerquen a las embarcaciones.
"Si las condiciones del mar lo permiten, hay que inmovilizar la embarcación y dejar el timón suelto, o poner marcha atrás y navegar el tiempo necesario, sin cambios bruscos de dirección", recomienda el ICNF. Además, el protocolo aconseja ponerse en contacto con las autoridades e informar de todos los avistamientos e interacciones.