Los senadores estadounidenses Richard Blumenthal y Lindsey Graham elogiaron la incursión de las tropas ucranianas en la región rusa de Kursk durante un encuentro con Zelenski en Kiev como parte de una delegación bipartidista del Congreso de Estados Unidos.
Durante una reunión con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, llevada a cabo el lunes, los senadores estadounidenses Richard Blumenthal y Lindsey Graham elogiaron la incursión de las tropas ucranianas en la región rusa de Kursk.
Los políticos norteamericanos mantuvieron un encuentro con Zelenski en Kiev como parte de una delegación bipartidista del Congreso de Estados Unidos. "Llevar esta guerra hasta el presidente ruso, Vladímir Putin, y tratar de hacer que comprenda la situación y que pague un precio por el conflicto es lo correcto", señaló Graham a Zelenski, añadiendo que la medida era "audaz y brillante".
El lunes, el máximo comandante militar ucraniano afirmó que sus fuerzas controlan ahora 1.000 kilómetros cuadrados de la vecina región fronteriza rusa de Kursk. La operación de las tropas de Ucrania se desarrolla en el más absoluto secreto y sus objetivos siguen sin estar claros.
La asombrosa maniobra, que ha cogido desprevenidas a las fuerzas del Kremlin, contrarresta el incesante esfuerzo de Rusia en los últimos meses por tratar de derribar las defensas ucranianas en puntos seleccionados a lo largo de la línea del frente en el este de Ucrania.
El mayor ataque en suelo ruso en los últimos 80 años
Rusia ha sufrido incursiones previas en su territorio durante los casi dos años y medio de guerra que han transcurrido hasta el momento, pero la incursión en la región de Kursk supuso el mayor ataque en suelo ruso desde la Segunda Guerra Mundial, constituyendo un hito en las hostilidades entre Rusia y Ucrania.
También, esta ha sido la primera ocasión en que el Ejército ucraniano ha encabezado una incursión en lugar de las realizadas por combatientes rusos proucranianos. Los senadores estadounidenses también conversaron con Zelenski sobre los planes para aprobar una ley llamada 'Stand by Ukraine', ('Apoyemos a Ucrania'), para codificar el apoyo de Estados Unidos a Ucrania.