Durante una visita no programada públicamente a Ucrania, el canciller alemán Olaf Scholz abordó dos de las demandas clave de Kiev: el suministro de misiles de largo alcance Taurus de fabricación alemana y sueca, y acelerar su pertenencia a la OTAN.
El canciller alemán Olaf Scholz visitó Ucrania por primera vez en más de dos años el lunes y prometió seguir apoyando a Kiev en la guerra, al tiempo que defendió su decisión de no entregar misiles de largo alcance Taurus.
Si bien, Alemania ha sido uno de los aliados más fuertes de Ucrania, Scholz se ha negado a ceder en dos de las solicitudes clave del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski: suministrar misiles de largo alcance Taurus de fabricación alemana y sueca a Ucrania e invitarla a unirse rápidamente a la OTAN.
Todo cerca de unas elecciones anticipadas
Scholz, que se enfrenta a una elección anticipada en febrero, ha presentado su negativa a enviar misiles Taurus como parte de un enfoque "prudente" al conflicto, a la vez que asegura a Ucrania un fuerte apoyo sin correr el riesgo de que la guerra se convierta en un conflicto entre la OTAN y Rusia.
¿Ucrania en la OTAN?
En un cambio importante, Zelenski señaló el viernes que una oferta de pertenencia de la OTAN para el territorio bajo el control de Kiev podría poner fin a "la etapa caliente de la guerra" en Ucrania.
Algunas naciones occidentales otorgaron permiso en noviembre para que Kiev realice ataques de largo alcance con las armas que han suministrado. Tras la decisión, Putin dijo que Rusia lanzó un ataque contra Ucrania con un misil balístico de alcance intermedio imparable llamado Oreshnik que, según él, no puede ser interceptado. Fue la primera vez que se utilizó un misil de ese tipo en la guerra o en cualquier otro conflicto.
Scholz ha sido cauteloso sobre las conversaciones sobre la incorporación acelerada de Ucrania en la OTAN. Ha enfatizado la importancia de encontrar un camino hacia la paz, que insiste no debe elegirse por encima de Ucrania.
Alemania es el país que más armas suministra a Ucrania después de EE.UU.
Alemania, líder en el suministro de sistemas de defensa aérea a Ucrania, ya ha suministrado cinco sistemas IRIS-T, tres sistemas Patriot y más de 50 cañones antiaéreos autopropulsados Gepard, dijo Scholz. Otro lote de ayuda militar que se entregará este mes incluirá otro sistema IRIS-T y más Gepards, agregó. Se enviará más material en 2025.
Rusia ha mantenido un bombardeo de áreas civiles de Ucrania y su red eléctrica. En los últimos meses, Rusia lanzó 347 misiles de varios tipos contra Ucrania, dijo Zelenski. Pidió más sistemas de defensa aérea occidentales, y agregó que alrededor de 20 objetos críticos no están protegidos. No dio más detalles.
Una llamada a Putin
La visita de Scholz también se produce solo unas semanas después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, lo reprendiera por tener una llamada telefónica con el presidente ruso, Vladimir Putin. Ucrania es sensible a la posibilidad de que aparezcan grietas en la unidad de sus aliados occidentales detrás de la ayuda contra Rusia, ya que Putin cuenta con que ese compromiso dure más.
Con la guerra a punto de entrar en su cuarto año, Zelenski dijo que no estaba de acuerdo con la llamada de Scholz a Putin. Zelenski dijo que esto podría dar lugar a llamadas telefónicas con otros líderes, posiblemente reduciendo el aislamiento internacional de Putin y legitimando su invasión a gran escala de Ucrania.
Scholz defendió la llamada, diciendo que quería recordarle a Putin que Ucrania es un país soberano e independiente que debería poder decidir su propio futuro. También destacó que le transmitió a Putin que Ucrania no está sola y que sus socios seguirán brindándole apoyo.
Durante la visita, Zelenski también llevó a Scholz a un hospital militar, donde los dos líderes hablaron con soldados heridos, así como a una exposición que mostraba drones de producción ucraniana y aquellos creados en Ucrania en cooperación con empresas alemanas.