Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 22 sep - Las ventas de casas en Estados Unidos cayeron levemente más que lo esperado en agosto, en medio de una oferta reducida, pero hay señales de que la fuerte aceleración de los precios de las viviendas y la demanda generada por la pandemia de COVID-19 probablemente estén perdiendo impulso.
No obstante, el mercado inmobiliario sigue activo. El reporte del miércoles de la Asociación Nacional de Agentes de Bienes Raíces mostró la menor proporción de personas que compraron su primera vivienda en más de dos años y medio y las casas se seguían vendiendo luego de apenas 17 días en el mercado.
"Hay una señal en la moderación de las alzas de precios y las ventas, y una proporción decreciente de quienes hacen su primera compra, de que ya ocurrió una parte considerable del ajuste de la demanda de viviendas a tasas bajas y de los movimientos de población impulsados por la pandemia", dijo Conrad DeQuadros, asesor económico senior de Brean Capital en Nueva York.
Las ventas de casas usadas cayeron un 2,0% a una tasa anual ajustada por estacionalidad de 5,88 millones de unidades el mes pasado. Las ventas cayeron en las cuatro regiones y el sur vio un descenso del 3,0%. Economistas encuestados por Reuters habían proyectado que las ventas caerían a una tasa de 5,89 millones de unidades en agosto.
Las ventas de viviendas unifamiliares cayeron un 1,9%, mientras que las ventas de condominios/cooperativas bajaron un 2,8%. Las reventas de casas, que representan la mayor parte de las ventas de viviendas en Estados Unidos, disminuyeron un 1,5% interanual.
La comparación anual se vio distorsionada por el aumento de las ventas impulsado por la pandemia en agosto de 2020. Las ventas aumentaron un 16% en lo que va de año en comparación con el mismo período en 2020.
El aumento, que se inclinó hacia el segmento del mercado de viviendas unifamiliares, superó con creces la oferta. Los costosos materiales de construcción, así como la escasez de tierra y mano de obra, han dificultado que los constructores impulsen la producción.
Datos del gobierno mostraron el martes que la construcción de viviendas unifamiliares cayó por segundo mes consecutivo en agosto.
El precio medio de las viviendas existentes aumentó un 14,9% con respecto al año anterior a 356.700 dólares en agosto. Sin embargo, el ritmo de aumento se está desacelerando y las guerras de ofertas están disminuyendo. Los precios de la vivienda se dispararon al menos un 23% en mayo.