Se esperan grandes multitudes en Norteamérica mientras un eclipse solar total cruza el continente.
Millones de espectadores se reunirán en toda América del Norte este lunes para ver un eclipse solar total.
El eclipse total significa que la Luna pasará entre el Sol y la Tierra, y se espera que algunas áreas tengan varios minutos de oscuridad. Si bien casi todos en Norteamérica tienen garantizado al menos un eclipse parcial, el eclipse total seguirá un camino estrecho. Pero las nubes podrían afectar la visualización.
El Servicio Meteorológico Nacional de EE. UU. pronosticó que las nubes en algunas partes de los estados de Texas, Arkansas, Ohio, Pensilvania y Nueva York podrían afectar la visión del eclipse.
"La nubosidad es una de las cosas más difíciles de pronosticar", explicó el domingo la meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional Alexa Maines en el Centro Científico de los Grandes Lagos de Cleveland. "Como mínimo, no nevará".
Se espera que los estados de Vermont y Maine, en el norte de EE. UU., y New Brunswick y Terranova en Canadá tengan el mejor clima durante el eclipse. Llueva o haga sol, "se trata simplemente de compartir la experiencia con otras personas", dijo Chris Lomas, un visitante procedente de Gotham, Inglaterra, que se hospeda en las afueras de Dallas, en el estado de Texas.
¿Qué esperar del eclipse solar?
Para el eclipse total de este lunes, la Luna debía deslizarse justo enfrente del Sol, bloqueándolo por completo. El crepúsculo resultante, en el que solo sería visible la atmósfera exterior o la corona del Sol, sería lo suficientemente largo para que las aves y otros animales guardaran silencio, y para que cobraran visibilidad planetas, estrellas y tal vez incluso un cometa.
La oscuridad durará hasta 4 minutos y 28 segundos, casi el doble que durante el eclipse de costa a costa de Estados Unidos hace siete años, porque la Luna está más cerca de la Tierra. Pasarán otros 21 años antes de que Estados Unidos vea otro eclipse solar total de esta escala. La sombra de la Luna tardará solo 1 hora y 40 minutos en recorrer más de 6.500 kilómetros a través del continente.
El eclipse de este lunes, que se extenderá durante cinco horas desde el primer mordisco del sol hasta el último, comienza en el Pacífico y 'toca tierra' en Mazatlán, México, antes de trasladarse a Texas, Oklahoma, Arkansas y otros 12 estados de EE. UU. en el Medio Oeste, el Atlántico Medio y Nueva Inglaterra, así como Canadá. La última parada será en Terranova, con el eclipse finalizando en el Atlántico Norte.
Se necesita protección ocular con gafas y filtros adecuados para mirar al Sol, excepto cuando se esconde completamente fuera de la vista durante un eclipse.
Desde España, el eclipse también podrá verse en las provincias gallegas de La Coruña y Pontevedra, así como en las islas de la provincia canaria de Santa Cruz de Tenerife y en Gran Canaria. Pero el fenómeno solo será visible durante unos minutos de manera parcial y muy débil.