El misterio en torno a 3I/ATLAS ha cautivado la imaginación de muchos, desde astrónomos destacados hasta estrellas pop como Kim Kardashian y el magnate tecnológico Elon Musk.
Cuando los astrónomos detectaron por primera vez al 3I/ATLAS el 1 de julio de 2025 captado por un telescopio espacial en Chile, quedó claro de inmediato que no era una simple roca espacial. Como el tercer objeto interestelar confirmado hasta la fecha, después de Oumuamua en 2017 y 2I/Borisov en 2019, 3I/ATLAS llamó la atención por su núcleo helado envuelto por un halo luminoso de gas y polvo.
Su velocidad y su trayectoria muestran que no está ligado gravitatoriamente al Sol, lo que significa que debió originarse en otro sistema estelar y entrar en el nuestro por azar.
Aunque la NASA identificó oficialmente la semana pasada a 3I/ATLAS como un cometa y no como un asteroide, algunos científicos, entre ellos el profesor Avi Loeb, astrofísico teórico de la Universidad de Harvard, han sugerido que sus rasgos inusuales podrían apuntar a indicios de tecnología extraterrestre. Y cuando a finales de octubre alcanzó su punto más cercano al Sol (perihelio), 3I/ATLAS empezó a comportarse de formas que vuelven a sorprender a los astrónomos.
Observaciones insólitas
Lo más llamativo es que el cometa experimentó una aceleración no gravitatoria cerca del perihelio, avanzando a mayor velocidad de la que permitiría la gravedad por sí sola. Observaciones con el Atacama Large Millimeter Array (ALMA) mostraron que el cometa se desvió cuatro segundos de arco de su trayectoria prevista, según una reciente entrada de blog de Loeb en Medium. Los cometas corrientes sufren ligeros empujes por los gases que desprenden sus superficies heladas, pero el movimiento de 3I/ATLAS fue inusualmente intenso.
Mientras tanto, su color cambió de forma drástica, de un tono rojizo a un azul intenso, algo atípico en los cometas, que suelen enrojecer cuando la luz solar se dispersa por el polvo que los rodea.
Los astrónomos también registraron un aumento repentino de brillo en los días previos al perihelio, lo que sugiere que se expulsaban grandes cantidades de material, posiblemente porque el hielo superficial se vaporizaba bajo el intenso calor solar.
Especulaciones y reacciones, de Elon Musk a Kim Kardashian
El comportamiento inusual ha reavivado las especulaciones sobre si 3I/ATLAS podría ser algo más que un cometa natural. Loeb ha propuesto en una reciente entrada de blog que "la aceleración no gravitatoria podría ser la huella tecnológica de un motor interno".
Añadió que, si en diciembre no se observa una nube de gas masiva alrededor del cometa, "entonces la aceleración no gravitatoria detectada cerca del perihelio podría considerarse un rastro tecnológico de un sistema de propulsión".
Figuras de la cultura y celebridades también han intervenido en el debate. Kim Kardashian escribió a la NASA en X para pedir aclaraciones sobre 3I/ATLAS, lo que motivó una respuesta tranquilizadora del administrador en funciones Sean Duffy. "Espera... ¿Qué pasa con 3I/ATLAS?", preguntó Kardashian.
Duffy respondió: "¡Gran pregunta! Las observaciones de la NASA muestran que este es el tercer cometa interestelar que atraviesa nuestro sistema solar. No hay alienígenas. No hay amenaza para la vida en la Tierra".
Mientras tanto, el consejero delegado de Space X y Tesla, Elon Musk, habló del cometa en 'The Joe Rogan Experience', y especuló con que su enorme tamaño y su composición inusual podrían ser catastróficos si alguna vez estuviera en ruta de colisión con la Tierra. Musk apuntó que, aunque 3I/ATLAS no supone una amenaza ahora, su potencial para causar daños a escala continental no puede ignorarse.