Los dos satélites de la ESA y varias naves de la NASA en y cerca de Marte observaron el cometa cuando pasó junto al planeta rojo a solo 29 millones de kilómetros el mes pasado.
La NASA ha divulgado imágenes en primer plano de 3I/ATLAS, el cometa interestelar que actualmente atraviesa nuestro sistema solar. El cometa acabará regresando al espacio interestelar para no volver.
Un cometa es una bola de nieve cósmica de gases congelados, roca y polvo que orbita el Sol, según la NASA. Sin embargo, la velocidad y la trayectoria de 3I/ATLAS muestran que no está ligado gravitacionalmente al Sol, lo que indica que se originó en otro sistema estelar y llegó al nuestro por azar.
Los investigadores tienen, por tanto, una oportunidad poco habitual de estudiar material de más allá de nuestra vecindad cósmica mientras atraviesa nuestro sistema solar.
"Este objeto es un cometa. Tiene aspecto y comportamiento de cometa, y todas las pruebas apuntan a que es un cometa", dijo Amit Kshatriya, administrador asociado de la NASA, en un vídeo en el que se revelan las nuevas imágenes.
"Pero este procede de fuera del sistema solar, lo que lo hace fascinante, emocionante y de gran importancia científica. Es solo el tercer objeto interestelar de este tipo que la humanidad ha encontrado".
Dos satélites de la Agencia Espacial Europea (ESA) y varias naves de la NASA en Marte y sus proximidades enfocaron el cometa cuando el mes pasado pasó a solo 29 millones de kilómetros del planeta rojo.
Científicos de la ESA también emplearon la nave Juice, con destino a Júpiter, para orientar sus cámaras e instrumentos científicos al cometa, especialmente tras su paso más cercano al Sol.
Sin embargo, no recibirán estas observaciones hasta febrero porque la antena principal de Juice actúa como escudo térmico mientras está cerca del Sol, lo que limita el flujo de datos.
Un visitante de paso en nuestro sistema solar
Los astrónomos han confirmado anteriormente que 3I/ATLAS se desplaza por el espacio a más de 61 kilómetros por segundo, y su velocidad aumenta a medida que se acerca al Sol.
El cometa es visible desde la Tierra en el cielo antes del amanecer con prismáticos o telescopio, y se acercará a la Tierra hasta solo 269 millones de kilómetros a mediados de diciembre.
Aunque su tamaño y forma siguen sin estar claros, la NASA señala que el diámetro del cometa podría situarse entre 440 metros y 5,6 kilómetros. "Afinaremos esa estimación", dijo Thomas Statler, científico principal de cuerpos pequeños del sistema solar en la división de ciencia planetaria de la NASA.
"La forma del núcleo también es difícil de determinar porque, en general, nuestras observaciones no lo resuelven. Está oculto por el polvo y, sobre todo, por la luz solar reflejada en el polvo en la parte interna de la coma", añadió Statler.
La agencia espacial ha señalado anteriormente en una publicación en X que el cometa "no supone una amenaza para la vida aquí en la Tierra". Los científicos de la NASA apuntan que probablemente 3I/ATLAS proceda de un sistema solar más antiguo que el nuestro.
"El 3I/ATLAS no es solo... una ventana a otro sistema solar, es una ventana al pasado remoto, tan remoto que antecede incluso a la formación de la Tierra y el Sol", dijo Statler.
3I/ATLAS fue detectado por primera vez por el telescopio del programa ATLAS en Chile en julio, lo que desató especulaciones sobre si 3I/ATLAS podría ser algo más que un cometa. El mes pasado, la agencia espacial confirmó que 3I/ATLAS es el tercer objeto interestelar observado en nuestro rincón del cosmos procedente de otra estrella, tras 'Oumuamua en 2017 y 2I/Borisov en 2019.