Kerry presenta al Congreso el acuerdo nuclear iraní bajo fuego cruzado

No es el mejor acuerdo, pero es mejor que nada. El jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, ha defendido este martes frente al Congreso de su país el pacto nuclear alcanzado con Irán en Viena el pasado 14 de julio. Tanto republicanos como demócratas se han mostrado muy reticentes ante la idea de un Irán nuclearizado. Kerry ha reconocido que Teherán continúa sembrando dudas y ha prometido que Estados Unidos no bajará la guardia por el mero hecho de que la República Islámica haya aceptado llegar a un compromiso.
“Estarán bajo una enorme presión”, decía, “y tendrán que respetar todas las inspecciones. Tendrán que responder por la investigación nuclear que realicen y también por el desarrollo de actividades que no incluyan material nuclear, por la fabricación y la producción de tecnología sensible, de centrifugadoras y otros componentes, por la construcción de instalaciones que pudieran servir para separar el plutonio, por las centrales de concentración y los residuos nucleares. Tendrán que mostrarnos todas estas cosas”, concluía.
A partir de ahora, el Congreso tiene sesenta días para examinar el acuerdo y pronunciarse al respecto. Pero en cualquier caso, el persidente Obama ya ha dicho que si la Cámara se opone, impondrá su veto para sacarlo adelante.