Con un Haka a pie de pista. Así recibió el personal del aeropuerto de Auckland a los campeones del mundo de rugby nada más bajar del avión. Unas
Con un Haka a pie de pista. Así recibió el personal del aeropuerto de Auckland a los campeones del mundo de rugby nada más bajar del avión.
Unas 4.000 personas aguardaban el regreso de Inglaterra de los All Blacks con su tercera Web Ellis.
Una euforia que también se vivió en el centro de la ciudad neozelandesa donde otras 50.000 esperaban a los campeones en el céntrico Parque Victoria.
“Va a ser muy triste pensar que ya no jugaré más en los All Blacks pero me lo he pasado muy bien y he disfrutado de cada minuto”, decía el considerado mejor jugador del año Dan Carter.
Pero las celebraciones no acaban aquí. Los All Blacks visitarán el jueves Christchurch y el viernes Wellington, la capital del país.
Otra llegada completamente distinta fue la del otro finalista. Los jugadores australianos no tuvieron un recibimiento tan eufórico en Sydney y los ánimos no eran los mismos.
A pesar de haber hecho un gran papel en la Copa del Mundo no pudieron batir a los neozelandeses y cedieron en la final 34 a 17.