Marin Cilic ganó por sorpresa el torneo de Cincinnati, antesala del Abierto de Estados Unidos.
Marin Cilic ganó por sorpresa el torneo de Cincinnati, antesala del Abierto de Estados Unidos.
Demostró que no, que Andy Murray no es invencible. El británico cayó derrotado en la final ante el croata que puso fin a la racha de veintidós victorias consecutivas del flamante campeón olímpico. Cilic marcó las diferencias ya en el primer set cuando rompió el servicio del británico.
En la segunda manga Cilic insistió aunque Andy Murray desplegó su mejor tenis para intentar llevarse el partido, pero no pudo.
El croata ya no dió más opciones a su rival, consiguió otro break en el undécimo juego, para ganar en dos sets y poco más de una hora y media por 6-4 y 7-5.
Es el primer Masters 1000 para Cilic, que hasta la fecha sólo había derrotado a Murray en dos ocasiones en trece enfrentamientos.